La edición de noviembre del periódico, Tribuna de Canarias dedica un especial a la “Innovación y Tecnología” donde se publica una entrevista con presidente de la Zona Especial Canaria (ZEC), Pablo Hernández González-Barreda.
Hace poco que usted es el presidente de la ZEC. ¿Era tal y como esperaba cuando llegó a este puesto?
El consorcio de la Zona Especial Canaria es un organismo muy especial por muchos motivos, primero porque hay un régimen fiscal único en Europa, porque tiene la participación en los órganos rectores, tanto de la administración general del Estado como del Gobierno de Canarias, con lo cual es una gestión entre dos administraciones; la siguiente particularidad, aunque la gente lo confunde, es un organismo del Estado.
Existen muy pocos organismos del Estado que se refieran únicamente a un trozo de España. Yo me he llevado una grata sorpresa dada a esa singularidad, te encuentras con muchos retos, una potencia de trabajo muy buena.
En la parte operativa me he llevado una sorpresa con la cantidad de empresas absolutamente
Es complejo el contexto en el que llevamos viviendo un año y medio, todos los empresarios buscan incentivos y alternativas. ¿Terminará el despegue a partir de ahora la ZEC?
Creo que sí, ya se está notando. Hay que tener en cuenta que la mayoría de regímenes fiscales de incentivos de otras regiones estuvieron unos 20 años sin atraer nada antes de que fueran conocidos y se empezaran a utilizar.
En la ZEC nos toca ahora, después de tanto tiempo, tener a esas multinacionales. La primera etapa fue un poco más plana ya que la ZEC, diseñada originalmente en el año 1994, fue modificada por la Comisión Europea; por lo tanto, cuando en el 2000 arrancó no teníamos carácter propio, luego se fue puliendo y, si nos fijamos es cifras, es a partir del 2014 cuando empieza un despliegue significativo, se triplica en nivel de empleo entre el 2014 y el 2020.
Eso se debe a que el instrumento se ajustó mucho, ya se ve que funciona, las empresas se interesan, hemos incorporado empresas muy punteras. En los primeros meses del año, en plena crisis económica, hemos creado 500 empleos.
¿Qué hace falta para que esas grandes multinacionales y empresas vengan a instalarse en la ZEC?
Hay grandes empresas que se están incorporando pero hay que trabajar mucho. Creo que hay tres factores fundamentales, uno es el ir puliendo y mejorando el instrumento para dotar a esas empresas de más valor añadido; el segundo punto es mejorar su difusión y promoción, una promoción más técnica orientada a esos perfiles que toman las decisiones de dónde implantar las empresas; el tercero fundamental es el talento, una estructura de talento suficiente para incorporar empresas.
Conviene recordar que el objetivo de la ZEC no es evadir impuestos, sino compensar y de esta forma atraer tejido productivo a Canarias, ¿es así?
Sí es fundamental, cuando uno habla de impuestos siempre vienen asuntos de dudosa reputación a la mente. Los paraísos fiscales no son paraísos fiscales porque se paguen muchos o pocos impuestos, sino porque son opacos, ocultos. Lo que sucede en Canarias sucede a la vista de todas las administraciones tributarias del mundo, cuando nos llega un requerimiento desde cualquier parte se les suministra toda la información.
En cuanto a baja tributación, el objetivo es compensar la lejanía, no evitar impuestos. Nosotros somos súper estrictos a la hora de alinear el impuesto que se paga aquí con que la entidad se desarrolle en Canarias. Si te quieres aprovechar de la ZEC, tiene que estar la actividad en Canarias y sólo puede entrar la facturación generada en Canarias.
La apuesta por la ZEC, tanto por el Gobierno del Estado como por el Gobierno de Canarias es máxima, además debemos saber que la tributación mínima no se aplicará a la ZEC. ¿Satisfecho?
Sí, es algo que se ha venido trabajando. El hecho de que exijamos que la actividad esté en Canarias, que lo controlemos mucho, que no permitamos ningún tipo de fraude, es lo que nos hace presentarnos ante el ministerio de hacienda o ante la comisión europea y que, cuando les pedimos que nos excluyan del impuesto mínimo, accedan a hacerlo.
Si queremos generar empleo en Canarias la actividad tiene que estar aquí, por lo tanto hemos recibido esa noticia con muchísima alegría.
El empleo relacionado con la innovación y la tecnología ha subido bastante en las islas, la incursión de empresas de este tipo también ha subido. ¿Será este el paraíso para la tecnología y la innovación si seguimos por este camino?
Precisamente la ZEC es uno de los motivos por los cuales estamos teniendo ese volumen en el sector tecnológico. En los últimos años las islas han crecido en un 88 % en cuanto a empleo tecnológico, somos la región de España que más ha crecido y la décima de toda Europa.
Creo que llegará a ser una parte importante de nuestra economía, nunca llegará al nivel de turismo, pero sí puede llegar a ser un componente importante de la actividad en Canarias. La ZEC ahí tiene un papel fundamental, en el área tecnológica dela Zona Especial Canaria, el empleo ha crecido en un 1000% en los últimos 6 años, es tremendo. En esa línea es donde estamos trabajando ya que, con el régimen fiscal, hacer actividades de creación tangibles es muy difícil, pero intangibles podemos proveer de servicios a todo el mundo.
Este año ha sido su aterrizaje, queda poco para acabar el 2021. ¿Qué retos se marca como presidente de la ZEC para este 2022?
Culminar y acometer la reorganización que estamos llevando a cabo para hacer una administración más moderna, ágil y dinámica y, de esta manera, poder atraer a estas empresas a través de un modelo de producción más técnico e individualizado. Desde la ZEC, queremos contribuir para descubrir y desarrollar ese talento mediante la formación, creo que son los puntos clave.